Oda a tener más de 70 años #149
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Queridos amigos,
Sin duda todos vamos a envejecer, yo voy directo a los sesenta, quedan sus años pero estoy en los descuentos. En Chile, si eres mujer, te conviertes en adulto mayor a esa edad y si eres hombre, a los sesenta y dos. Es decir, en nueve años podré saltarme las filas, estacionarme al lado de la escalera mecánica y pagar más barato por las entradas.
¿Seré vieja a los sesenta? Claro que no, pero la sociedad nos condena una y otra vez. Ignoro cómo llegaré pero tengo un gran ejemplo desde hace un año: las participantes que asisten a mi taller de lectura de los martes. La mayoría tiene sobre setenta años, solo dos de ellas son más jóvenes. Estas alumnas me han enseñado mucho, son un ejemplo de cómo llegar a la tercera edad con lucidez y energía. Se supone que soy la profesora, pero ignoran cuánto estoy aprendiendo de ellas. Son muy puntuales, llegan manejando, algunas leen en Kindle y otras al igual que yo, siguen fieles al papel. Su actitud es lo que más me impacta; están al día, poseen una memoria fantástica y una capacidad de lectura que yo también quisiera. Están atentas, se manejan con libertad por la ciudad, sus opiniones son francas y asertivas. Además, son estupendas.
La escritora Agatha Christie dijo que había que casarse con un arqueólogo porque así a medida que nos hacemos viejas, más bella te encontraría. Ninguna de mis alumnas está casada con un arqueólogo y estoy segura de que sus parejas las ven más bellas. Porque de verdad, lo son. Tal como dijo l escritor y filósofo Ralph W. Emerson: “la belleza se convierte en cualidad interior”. En estas mujeres hay una luz que se llama sabiduría, una fuerza que se llama persistencia y una risa que se llama inteligencia.
Imposible olvidar la serie The Golden Years que en español se llamó Los años dorados donde cuatro amigas ya viudas y una divorciada comparten un departamento. Estuvo al aire desde 1985 durante siete años. En esta sitcom cada una cumple un rol, y lo increíble es que se conocieron gracias a que Blanche puso un aviso en un supermercado.
Para llegar a los setenta así de bien supongo que hay que cumplir con la receta de vida sana, deporte, amigos, familia y todo lo que sabemos. A mis alumnas no les he preguntado cuál es su secreto, pero sí sé que me hacen feliz.
Te invito a escuchar el Cuestionario Espiral con el escritor argentino, Patricio Pron.
Mis recomendaciones
- Una novela: Adiós Mr. Chip o Good-bye, Mr. Chips de James Hilton que acaba de ser reeditada por editorial Trotalibros. Se publicó en 1934 y tiene varias versiones cinematográficas. Narra la historia de un profesor de latín y griego que enseña en una escuela pública en Brookfield (Inglaterra). Él quedó viudo a temprana edad y su vida gira en torno al colegio. Esta novela la vas a disfrutar, donde no hay ni buenos ni malos, solo la naturaleza humana reflejada con maestría. Con Mr. Chipping vamos descubriendo la historia de Gran Bretaña y también, el impacto que un buen docente tiene en sus alumnos. Es una figura legendaria, donde algunos se preguntan por la juventud del profesor. Les recomiendo esta edición de Trotalibros. Una pequeña joya.
- Una película: Alguien tiene que ceder o Something’s Gotta Give. No es ninguna novedad pero, ¿por qué no refrescar la mente? La he visto dos veces y la podría ver una tercera con las actuaciones deliciosas de Diane Keaton y Jack Nicholson, que por un motivo u otro, se conocen y se convierten en algo más que amigos. Lo interesante es ver el tipo de relación que se establece en la tercera edad.
Mis momentos
- Fui feliz: Tomando once con mis amigas.
- Algo que aprendí: Gracias a Francesca Signorio, alumna de mi taller de los miércoles, aprendí que en Italia hay grandes fricciones entre los que viven al norte y al sur del país. Si bien estaba al tanto de que el sur es más precario, no tenía idea la deferencia que se produce si vives más abajo que Roma. También contó que gracias a la televisión y la radio, el idioma italiano, comenzó a tener mayor penetración frente al dialecto.
- Estoy agradecida: De que mis hijos me ayudan mucho en la casa.
Lee. Escribe. Crea con setenta años y más.
Karen.
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